La posición de los virus como frontera entre lo vivo y lo inerte plantea a los científicos el problema de su origen. Para muchos, los virus serían los primeros seres, en la evolución de lo inerte a lo vivo, que lograrían reunir con eficacia las funciones de replicación, transcripción y traducción. Serían, pues, los organismos menos evolucionados.
A otros, el hecho de que los virus solamente puedan realizar esas tres funciones vitales en el interior de células vivas, les lleva a pensar que los virus no pudieron existir antes de que aparecieran las primeras células, por muy simples que éstas fueran. Los virus serían formas regresivas de organismos celulares que se han adaptado de forma extrema al parasitismo.
Es difícil saber una causa del porque surgieron los virus, ya que algunos científicos como Temín explican que surgieron junto con la vida o pudiera ser que después de esta, también pudieron haber sido el resultado de la evolución de los virus de ADN que procederían de un provirus y los de ARN de los viroides. O simplemente porque resultaron formas regresivas resultantes de la especialización del parasitismo.
A otros, el hecho de que los virus solamente puedan realizar esas tres funciones vitales en el interior de células vivas, les lleva a pensar que los virus no pudieron existir antes de que aparecieran las primeras células, por muy simples que éstas fueran. Los virus serían formas regresivas de organismos celulares que se han adaptado de forma extrema al parasitismo.
Es difícil saber una causa del porque surgieron los virus, ya que algunos científicos como Temín explican que surgieron junto con la vida o pudiera ser que después de esta, también pudieron haber sido el resultado de la evolución de los virus de ADN que procederían de un provirus y los de ARN de los viroides. O simplemente porque resultaron formas regresivas resultantes de la especialización del parasitismo.
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